El Fenómeno Se Disipa Y Comienza Una Fase Neutra
El fenómeno de La Niña ha llegado a su fin, marcando una nueva etapa de incertidumbre para el clima mundial. De acuerdo con un informe reciente de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de EE.UU. (NOAA), actualmente no hay señales ni de La Niña ni de su contraparte, El Niño. En su lugar, ha iniciado una fase neutra que se espera que se mantenga al menos hasta inicios del otoño boreal.
Aunque la atmósfera mostró características de La Niña desde el otoño del año pasado, las temperaturas más frías de lo habitual en el océano Pacífico tropical —una señal clave de su presencia— no se materializaron de manera clara sino hasta finales del año. Incluso entonces, esas condiciones duraron apenas unos pocos meses.
Michelle L’Heureux, climatóloga del Centro de Predicción Climática, explicó que los efectos de La Niña no desaparecen de inmediato. “Sus huellas perduran, aunque es difícil estimar cuánto tiempo y en qué medida se mantendrán”, comentó.
Huracanes Sin Guía Clara Para la Temporada 2025
La llegada de una fase neutra complica las previsiones para la temporada de huracanes en el Atlántico, que inicia en junio. En condiciones normales, La Niña tiende a aumentar la actividad ciclónica, mientras que El Niño la reduce. Sin embargo, la falta de uno u otro impide ofrecer un pronóstico claro.
Para este año, meteorólogos y especialistas advierten que la influencia principal podría ser el exceso de calor en los océanos, derivado del calentamiento del planeta causado por la quema de combustibles fósiles. Esta situación alimenta la preocupación de que la temporada de huracanes sea intensa, pese a la neutralidad climática.
El año pasado, condiciones similares resultaron en una temporada extremadamente activa: se formaron 18 ciclones tropicales con nombre, de los cuales 11 fueron huracanes, incluyendo a Helene y Milton que impactaron directamente en Estados Unidos. El océano sigue acumulando calor, y cerca del 90% del exceso térmico global se almacena en él, lo que ralentiza su enfriamiento.
El Calor Extremo Continuará en Verano
Los efectos de esta transición climática también se reflejan en las previsiones de temperatura. El Centro de Predicciones Climáticas estima que el calor se mantendrá por encima del promedio durante la primavera y el verano en casi todo Estados Unidos, con excepción del noroeste del Pacífico y algunas zonas del norte.
Estas temperaturas superiores a la media están ligadas al calentamiento global y a patrones de sequía persistente, creando un círculo vicioso en el que el calor y la falta de lluvia se retroalimentan, intensificándose mutuamente.
El Panel Intergubernamental de Cambio Climático (IPCC) ha señalado que los glaciares son especialmente sensibles a los efectos del cambio climático, convirtiéndose en indicadores clave para monitorear las transformaciones del sistema climático global.
Expectativa Ante Condiciones Inciertas
A pesar de no contar con una señal clara como El Niño o La Niña, los meteorólogos seguirán monitoreando el desarrollo de los patrones de clima. La fase neutra podría extenderse más de lo previsto o dar paso a un nuevo episodio de El Niño más adelante en el año.
La NOAA recalca que aún hay tiempo para ajustar los pronósticos a medida que se desarrollan nuevas condiciones en el océano y la atmósfera. Mientras tanto, el mundo se enfrenta a un clima cada vez más impredecible, donde el impacto de la actividad humana sigue siendo el principal factor de transformación.