La administración Trump se prepara para eliminar dos divisiones clave dentro de la Agencia de Protección Ambiental (EPA) centradas en el cambio climático y la eficiencia energética, según fuentes consultadas por CNN. Entre los programas que serán cancelados se encuentra Energy Star, una iniciativa ampliamente reconocida que promueve electrodomésticos de bajo consumo energético.
De acuerdo con las fuentes, la EPA planea cerrar su división de cambio climático y la división de asociación para la protección del clima, ambas ubicadas en la Oficina de Aire y Radiación. Esta reestructuración afectará varios programas climáticos importantes, incluido el programa de reporte de gases de efecto invernadero y las asociaciones de la EPA enfocadas en las emisiones de metano, un gas altamente contaminante.
Uno de los recortes más significativos sería el cierre del programa Energy Star. Fundado durante la primera administración Bush en 1992, este programa se convirtió en un símbolo de eficiencia energética en los hogares estadounidenses, ayudando a los consumidores a identificar productos que reducen tanto el consumo como los costos energéticos. Más del 90% de los hogares en Estados Unidos reconocen su etiqueta.
El presidente Donald Trump ya había propuesto desmantelar o privatizar Energy Star durante su primer mandato, pero su futuro había permanecido incierto hasta ahora. A pesar de los esfuerzos bipartidistas por salvarlo, las fuentes indican que la administración procederá con su cierre.
Críticas Y Preocupaciones Económicas
El posible cierre del programa ha generado fuertes críticas por parte de grupos medioambientales y defensores de la eficiencia energética. Paula Glover, presidenta de la organización sin fines de lucro Alliance to Save Energy, subrayó a CNN la contradicción entre eliminar el programa y la promesa de reducir los costos energéticos de los hogares.
“Por solo 32 millones de dólares anuales, Energy Star ayuda a las familias estadounidenses a ahorrar más de 40.000 millones de dólares en costos de energía cada año”, explicó Glover, destacando que el retorno es de 350 dólares por cada dólar federal invertido.
Joe Goffman, quien lideró la Oficina de Aire y Radiación de la EPA bajo la administración Biden, también resaltó la importancia de Energy Star, afirmando que las calificaciones de eficiencia energética forman parte de las decisiones de compra de decenas de millones de hogares estadounidenses.
A pesar de la presión creciente, un portavoz de Energy Star no respondió a las solicitudes de comentarios de CNN. La EPA, por su parte, defendió los cambios organizativos, asegurando que se busca mejorar su estructura para “beneficiar directamente al pueblo estadounidense” y avanzar en su misión de proteger el aire, el agua y la tierra.
Impacto en la Regulación Climática
La eliminación de Energy Star forma parte de una serie de cierres dentro de la Oficina de Aire y Radiación, que bajo la administración Biden había impulsado regulaciones importantes para reducir la contaminación y las emisiones de gases de efecto invernadero.
El actual administrador de la EPA, Lee Zeldin, anunció en marzo que el organismo revertiría más de una docena de regulaciones ambientales implementadas durante el gobierno de Biden. Además, la administración Trump planea reconsiderar un hallazgo científico fundamental sobre los peligros de la contaminación climática, lo que podría despojar a la EPA de su autoridad para regular los gases que contribuyen al calentamiento global.
Expertos ambientales advierten que estos cierres limitarán significativamente la capacidad del gobierno para medir y controlar las emisiones contaminantes, en un momento crítico para la lucha contra el cambio climático.
Cambio de Rumbo
Esta decisión marca un fuerte viraje respecto a la estrategia climática de la administración anterior. Mientras que funcionarios de Trump enmarcan la reorganización como una mejora para la eficiencia gubernamental, críticos sostienen que eliminar programas efectivos y ampliamente aceptados como Energy Star compromete no solo el bienestar económico de los hogares, sino también la salud ambiental a largo plazo.
La administración Biden había hecho avances significativos en la reducción de emisiones y la promoción de tecnologías limpias. Ahora, bajo Trump, la EPA parece enfocarse en una estrategia de desregulación y en revertir protecciones ambientales clave.
Aunque el futuro de Energy Star y otros programas amenazados sigue siendo incierto, es probable que la oposición pública y legislativa intente frenar o revertir estas medidas en los próximos meses.