En un reciente informe de Fitch, Paraguay ha sido calificado con BB+, situándolo a un paso de alcanzar el anhelado grado de inversión. Esta noticia ha sido recibida con optimismo por el gobierno paraguayo, especialmente en Asunción, donde el Ministerio de Economía celebra este logro. Sin embargo, la agencia de calificación también ha señalado varios desafíos que enfrenta el país, incluyendo aspectos de credibilidad y vulnerabilidad a shocks climáticos.
La evaluación de Fitch destaca la trayectoria de Paraguay en la implementación de políticas macroeconómicas prudentes y consistentes, su bajo nivel de deuda pública y una robusta liquidez en moneda extranjera. No obstante, Fitch advierte sobre debilidades en la gobernabilidad y un mercado de capitales local poco profundo, además de la alta volatilidad del PIB debido a su vulnerabilidad a eventos climáticos adversos.
El Ministro de Economía, Carlos Fernández Valdovinos, se ha mostrado comprometido con el fomento del crecimiento económico. Resaltó la ratificación de la calificación soberana por parte de Fitch y el potencial para que empresas paraguayas alcancen el Grado de Inversión. “Es una excelente noticia… Seguimos trabajando incansablemente para mejorar la economía de nuestro país”, afirmó Fernández Valdovinos.
El reporte de Fitch también elogia los esfuerzos del Presidente Santiago Peña en promover una agenda verde y favorable a los negocios, incluyendo avances significativos como la ley de bonos de carbono y reformas en colaboración con el FMI. Sin embargo, la agencia enfatiza la necesidad de una consolidación fiscal creíble para estabilizar la relación deuda pública/PIB y restaurar la credibilidad fiscal.
Fitch anticipa un crecimiento económico de 5.2% para este año, impulsado por la recuperación de los sectores agrícola e hidroeléctrico. Para los próximos años, se pronostica un crecimiento sólido del 4.5%, apoyado en inversiones en celulosa, hidrógeno verde y biocombustibles, que podrían ayudar a mitigar la vulnerabilidad climática. Además, la inflación ha mostrado una tendencia decreciente, con el Banco Central del Paraguay recortando gradualmente las tasas de interés, reflejando una gestión prudente.
El análisis de Fitch sobre Paraguay es un reflejo de un país en una encrucijada, con logros significativos en su economía y desafíos sustanciales por delante. Mientras que la calificación BB+ es motivo de celebración, es también un recordatorio de que el camino hacia la estabilidad y el crecimiento sostenible requiere de esfuerzos continuos y adaptaciones estratégicas.