Argentina marca un hito en su historia de defensa y soberanía con la certificación exitosa de su propio banco de pruebas para cartuchos de asientos eyectables por parte del Instituto de Investigaciones Científicas y Técnicas para la Defensa (CITEDEF). Este logro representa un paso significativo hacia la autosuficiencia del país en el sector de defensa, desafiando el embargo británico que ha mantenido en tierra a los cazas Super Etendard/SEM desde su adquisición en 2019. La revista Pucará Defensa destaca este proyecto como un esfuerzo de más de un año para reemplazar los cartuchos de fabricación británica y alcanzar una mayor autonomía en el mantenimiento de las capacidades de defensa aérea de Argentina.
El nuevo banco de pruebas, operativo desde abril de 2023, permite a Argentina no solo evaluar y prolongar la vida útil de los cartuchos existentes, sino también avanzar hacia el desarrollo de componentes pirotécnicos/propulsivos autóctonos. Este avance es crucial para la flota de cazas Super Étendard Modernisé (SEM), proporcionando la posibilidad de volver a poner en servicio estos aviones sin dependencia de proveedores extranjeros. Como señaló Pucará Defensa, “Con esta certificación, el escenario cambia para los aviones SEM”, marcando una nueva era para las Fuerzas Armadas argentinas.
La importancia de este desarrollo trasciende la inmediata capacidad operativa de la flota de cazas SEM, posicionando a Argentina en un camino hacia el liderazgo regional en la producción de tecnología crítica para la defensa. Sin embargo, este camino no está exento de desafíos. El CITEDEF debe garantizar que sus cartuchos cumplan con las estrictas normas de seguridad y rendimiento exigidas para la aviación militar, además de superar obstáculos políticos y diplomáticos, especialmente si busca exportar su tecnología.
En medio de estos avances, la semana pasada, el ex jefe del CITEDEF, Pablo Bolcatto, expresó preocupaciones sobre el futuro de la defensa y la soberanía argentina bajo la administración actual, citando recortes presupuestarios que podrían afectar el desarrollo y la implementación de tecnologías críticas como estas.
Este logro del CITEDEF no solo demuestra el compromiso de Argentina con la independencia tecnológica y la autosuficiencia en defensa, sino que también subraya los desafíos continuos que el país enfrenta en su camino hacia la soberanía tecnológica completa.