El 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, es una ocasión crucial para reflexionar sobre la participación de las mujeres en diversos ámbitos, incluido el gaming. Esta fecha conmemorativa nos invita a concientizarnos sobre las problemáticas que enfrentan las mujeres y a considerar cómo podemos contribuir a crear un mundo más equitativo.
En muchos aspectos de la vida diaria, las mujeres se enfrentan a desafíos, ya sea al salir a la calle, expresarse en redes sociales o disfrutar de su tiempo libre en el mundo geek, incluido el gaming en línea. Es fundamental que como sociedad reconozcamos que las mujeres tienen el mismo derecho que los hombres a jugar, expresarse y consumir en estos espacios.
Es importante practicar la empatía y ponerse en los zapatos de las mujeres para poder comprender y apoyar sus experiencias. Discriminar a alguien por su género, en lugar de evaluar sus méritos y argumentos, es insostenible en la actualidad.
En el ámbito de los videojuegos, es crucial reconocer y cuestionar las estructuras y narrativas que tradicionalmente han favorecido a los hombres. Juegos como The Last of Us, Life is Strange y Tomb Raider han sido creados con perspectivas femeninas, reinventando roles y estéticas que antes servían principalmente a los hombres.
Es fundamental señalar y condenar las malas conductas de algunos hombres hacia las mujeres en el mundo del gaming. Ser aliados en la lucha por la igualdad de género implica cambiar comportamientos y actitudes arraigadas, así como enseñar a las nuevas generaciones valores de respeto e inclusión.
Es necesario educarse sobre las causas y perspectivas feministas, sin esperar que las mujeres expliquen constantemente sus motivaciones y razones. Compartir el ocio y las responsabilidades de manera justa en el hogar y en la sociedad también es crucial para crear un mundo más equitativo.
Finalmente, es importante respetar las ambiciones y placeres de las mujeres, permitiéndoles perseguir sus propias metas y libertades. Esto implica dejar de lado los estereotipos de género que limitan sus capacidades y gustos.
Básicamente, mejorar el mundo para las mujeres en el gaming y en todos los ámbitos requiere practicar la empatía, cuestionar estructuras y narrativas obsoletas, condenar las malas conductas, educarse sobre las causas feministas y compartir el ocio y las responsabilidades de manera equitativa.