La Pasión Futbolera Del Papa Marcó Su Vida y Su Legado
Desde su elección como líder de la Iglesia Católica en marzo de 2013, el Papa Francisco nunca ocultó su amor por el futbol. A diferencia de sus predecesores, Jorge Mario Bergoglio entendió al deporte no solo como un entretenimiento, sino como una escuela de valores, una herramienta de conexión con el pueblo y un lenguaje universal capaz de transmitir esperanza y fraternidad.
“Jugar hace feliz, porque a través del juego puede expresarse la propia libertad”, escribió en su autobiografía Esperanza. En ese mismo texto confesó que nunca fue hábil con el balón—“era pata dura”—pero eso nunca fue impedimento para disfrutarlo. Su posición favorita, recordó, era la de portero: “Una buena posición que le entrena a uno a encarar la realidad, a enfrentarse a los problemas”.
Un Cuervo Eterno: Su Pasión Por San Lorenzo
El amor del Papa por el Club Atlético San Lorenzo de Almagro fue conocido y celebrado dentro y fuera del Vaticano. Fanático desde la infancia, asistió a partidos en el Viejo Gasómetro desde los 10 años y nunca abandonó su afiliación al club, incluso como pontífice. En 2014, celebró desde Roma la histórica Copa Libertadores ganada por el Ciclón, apenas 10 meses después de convertirse en Papa.
La cuenta oficial del club despidió al socio número 88235 con un emotivo mensaje tras su fallecimiento: “Nunca fue uno más y siempre fue uno de los nuestros… ¡Adiós, gracias y hasta siempre! ¡Estaremos juntos por la eternidad!”. Curiosamente, el Papa falleció a los 88 años, a las 2:35 am hora de Argentina.
Encuentros Con Messi, Reflexiones Sobre Maradona Y Tributo a Pelé
Como argentino, el Papa Francisco también mantuvo una estrecha relación con la Selección Argentina, a la que recibió en el Vaticano en 2013. Uno de los momentos más recordados fue su encuentro con Lionel Messi, a quien saludó con afecto: “Tú das alegría a millones. No olvides jugar con humildad y alegría”.
En 2019, defendió a Messi cuando se le cuestionó si era un “dios del futbol”: “En teoría, es un sacrilegio… pero son expresiones populares. Adorar, solamente a Dios”.
Sobre Diego Maradona, a quien recibió en su primer año como Papa, fue directo: “Fue un grande, pero como hombre falló. Resbaló con su entorno. El pobre falleció, y es curioso, muchos jugadores acaban mal”.
Sin embargo, cuando se le preguntó si prefería a Messi o a Maradona, el Papa respondió sin dudar: “Yo agregaría un tercero: Pelé”. Y añadió con respeto: “Maradona fue un grande, Messi es correctísimo, pero el gran señor es Pelé. Lo conocí una vez en un avión. Un hombre de gran humanidad y gran corazón”.
Futbol Como Mensaje de Fe, Humildad Y Alegría
Francisco I convirtió su pasión por el futbol en una plataforma para enviar mensajes de humildad, inclusión y esperanza. Siempre insistió en que el deporte debía vivirse desde el juego limpio, la solidaridad y la alegría compartida, más allá de la victoria.
Su cercanía con clubes, jugadores y aficionados de todo el mundo lo convirtió en una figura querida también fuera del ámbito religioso. Su legado no solo quedará en las encíclicas, sino también en las tribunas, en los estadios y en los corazones de quienes entendieron que el futbol, como la fe, puede unir, sanar y dar sentido.