La conmemoración del Día Internacional de las Mujeres y las Niñas en la Ciencia no solo reconoce los logros femeninos en el campo científico, sino que también resalta su papel esencial en la preservación de la biodiversidad. Durante la novena asamblea de la ONU en Nueva York, expertas en ciencia se reunieron para debatir sobre el liderazgo de las mujeres en la promoción de los tres pilares del desarrollo sostenible: la prosperidad económica, la justicia social y la integridad medioambiental.
En esta línea, Mongabay Latam se une a la celebración presentando cuatro proyectos liderados por mujeres que han marcado la diferencia en la protección de especies emblemáticas en Latinoamérica.
El trabajo de las biólogas Fanny Cornejo y Yuliana Bedolla ha sido reconocido a nivel mundial con el Premio Conservacionista Emergente del Indianapolis Prize y el Premio Whitley, respectivamente. Cornejo ha sido premiada por su destacado esfuerzo en la conservación del mono choro de cola amarilla en Perú, mientras que Bedolla ha sido galardonada por su labor con aves en México.
Por otro lado, científicas colombianas han llevado a cabo un estudio sobre los cantos de las ballenas jorobadas en el Pacífico colombiano, grabando más de 40 horas de sonidos. Este trabajo proporciona información crucial para la conservación de esta especie emblemática.
La bióloga Izabela Stachowicz ha dedicado más de una década a la conservación de la fauna y los bosques de Venezuela, centrándose en la protección de la danta y su hábitat único en la Gran Sabana.
Estos proyectos demuestran el papel vital que desempeñan las mujeres científicas en la conservación de la biodiversidad y la protección de especies en riesgo. Su dedicación y liderazgo son fundamentales para alcanzar los objetivos de desarrollo sostenible y garantizar un futuro próspero y equilibrado para nuestro planeta.
El reconocimiento internacional de estas mujeres no solo resalta sus logros individuales, sino que también inspira a nuevas generaciones de científicas a seguir sus pasos y contribuir al avance de la ciencia y la conservación.
En un mundo donde la biodiversidad enfrenta numerosos desafíos, el trabajo de estas mujeres es un rayo de esperanza, recordándonos el poder del conocimiento científico y la determinación humana para proteger nuestro entorno natural.
La celebración del Día Internacional de las Mujeres y las Niñas en la Ciencia nos recuerda que el talento y la dedicación no tienen género, y que juntos podemos construir un futuro más sostenible y equitativo para todos.