Científicos latinoamericanos lideran la iniciativa para construir un nuevo acelerador de partículas en la región, bajo el proyecto LAMISTAD (Proyecto de Sincrotrón Internacional Latinoamericano para Tecnología, Análisis y Desarrollo). Este proyecto, recientemente detallado en un artículo publicado en Nature, busca impulsar la investigación científica en América Latina y el Caribe, ofreciendo un acceso local a tecnología de vanguardia que históricamente ha estado concentrada en países desarrollados.
Los aceleradores de partículas son dispositivos esenciales para la investigación en física de partículas y diversas disciplinas científicas. Estos instrumentos aceleran partículas subatómicas como electrones, protones o iones a velocidades cercanas a la velocidad de la luz, permitiendo a los científicos estudiar sus propiedades y comportamientos. En particular, los sincrotrones, como el propuesto por LAMISTAD, generan una forma específica de radiación electromagnética que se utiliza en una amplia gama de aplicaciones científicas, desde la biología estructural hasta la ciencia de materiales.
La propuesta de LAMISTAD busca llenar un vacío en la infraestructura científica de América Latina y el Caribe. Hasta ahora, la mayoría de los aceleradores de partículas se han construido en países desarrollados, dejando a la región rezagada en la investigación científica de vanguardia. Si bien instalaciones como el Sirius en Brasil han representado avances significativos, la accesibilidad para países fuera de la región sur del continente ha sido limitada.
El proyecto LAMISTAD identifica a México como un lugar estratégico para ubicar el nuevo acelerador de partículas. El estado de Hidalgo, en particular, se ha destacado como una ubicación potencial debido a su estabilidad geológica y la infraestructura adecuada disponible. Además, las autoridades locales y federales han mostrado receptividad para ceder terreno y apoyar el desarrollo del proyecto.
Sin embargo, la realización del proyecto enfrenta desafíos significativos, incluida la necesidad de una cooperación estrecha entre gobiernos y científicos, la determinación del financiamiento y la selección de la fuente de energía para la operación del sincrotrón. Se estima que la construcción del acelerador en México requeriría una inversión de varios cientos de millones de dólares, con costos adicionales para el mantenimiento anual.
A pesar de estos desafíos, los impulsores de LAMISTAD están entusiasmados con el potencial impacto del proyecto en la región. La instalación de un acelerador de partículas en el Gran Caribe no solo promovería la colaboración científica regional, sino que también abriría oportunidades para el intercambio de recursos humanos y materiales, así como el desarrollo de un ecosistema económico basado en la ciencia de sincrotrón.
Aunque aún no se ha finalizado un plan concreto para la creación del acelerador de partículas del Gran Caribe, el interés en el proyecto está creciendo rápidamente. Recientemente, el proyecto LAMISTAD organizó un evento híbrido en varios países, con el objetivo de establecer una hoja de ruta para la consolidación de la instalación.
Con la promesa de avanzar en la investigación científica y promover el desarrollo regional, el proyecto LAMISTAD representa un paso crucial hacia un futuro más brillante para América Latina y el Caribe en el ámbito científico y tecnológico.