La innovación en salud en América Latina está tomando fuerza con iniciativas que combinan ciencia, tecnología y compromiso social. Ocho proyectos fueron seleccionados entre más de 170 propuestas para ser parte de una experiencia única en uno de los ecosistemas de salud más avanzados del mundo. Entre ellos, un desarrollo mexicano promete mejorar la calidad de vida de personas con Parkinson.
Un Impulso Al Talento Latinoamericano en Salud
Una iniciativa conjunta entre organizaciones regionales de innovación farmacéutica e institutos especializados ha dado lugar a una convocatoria que busca identificar soluciones que están transformando los sistemas de salud en América Latina. A través de esta plataforma, se recibieron 178 proyectos provenientes de 11 países, destacando por su enfoque en tecnología, prevención, atención médica y bienestar social.
El país con mayor número de postulaciones fue Colombia, seguido por México y Perú, mostrando el interés creciente en el desarrollo de soluciones médicas dentro de la región. Tras un proceso de evaluación, 32 proyectos fueron seleccionados como finalistas, de los cuales solo ocho fueron reconocidos como ganadores.
Estos ocho proyectos representan lo mejor del emprendimiento en salud del continente, y sus creadores fueron invitados a vivir una experiencia de inmersión en un entorno internacional de alto nivel, diseñado para conectar talento, tecnología y oportunidades de crecimiento.
Ecosistemas de Innovación: La Experiencia Internacional
Los proyectos ganadores participaron en una misión internacional dentro de un ecosistema de innovación en salud considerado uno de los más potentes del mundo. Instituciones académicas de renombre, centros de investigación, empresas tecnológicas y farmacéuticas abrieron sus puertas para mostrar cómo se crean soluciones de alto impacto a partir de la colaboración, el conocimiento y la inversión estratégica.
Durante esta misión, los participantes tuvieron acceso a espacios donde se desarrollan avances científicos de talla mundial. La experiencia no solo buscó inspirar, sino también fomentar conexiones clave con otros profesionales, investigadores y aliados estratégicos que puedan apoyar el crecimiento y escalabilidad de estas ideas.
Este encuentro dejó claro que la innovación en salud no puede crecer de manera aislada. Requiere de un ecosistema sólido que entienda la importancia de generar respuestas concretas a los desafíos médicos de la región, y que impulse el trabajo colectivo entre instituciones, empresas y emprendedores.
HikeOn: Innovación Mexicana Para El Parkinson
Entre los ocho proyectos ganadores se encuentra HikeOn, una propuesta mexicana que está revolucionando la forma en que se aborda uno de los síntomas más comunes y limitantes de la enfermedad de Parkinson: el congelamiento de la marcha. Este síntoma, que provoca una sensación de tener los pies pegados al suelo, afecta a un alto porcentaje de personas diagnosticadas y aumenta considerablemente el riesgo de caídas.
HikeOn desarrolló un dispositivo no invasivo tipo brazalete, que funciona mediante vibraciones rítmicas temporizadas y ajustadas en velocidad. Estas vibraciones actúan como una especie de metrónomo, guiando al usuario en su ritmo de caminata y facilitando el movimiento. El objetivo del dispositivo es reducir la cantidad de caídas y mejorar la movilidad de quienes viven con esta enfermedad.
Con este desarrollo patentado, la empresa mexicana buscará ahora alianzas estratégicas que permitan su distribución a nivel regional. Se trata de un ejemplo concreto de cómo la tecnología puede marcar una diferencia significativa en la vida de las personas cuando se orienta al bienestar común.
Talento Latino Con Propósito E Impacto
Además del reconocimiento, los 32 proyectos finalistas recibirán acompañamiento especializado para fortalecer su estrategia de propiedad intelectual. El objetivo es que sus ideas no solo lleguen al mercado, sino que también lo hagan de forma protegida, sostenible y escalable. Este proceso incluye mentorías y visibilidad dentro de informes especializados sobre innovación en salud en la región.
Esta iniciativa también pone énfasis en que la propiedad intelectual no debe verse únicamente como una protección legal, sino como una herramienta esencial que impulsa la innovación, facilita la inversión en ciencia, y asegura que los avances lleguen a las comunidades que más los necesitan.
Los proyectos reconocidos este año son reflejo del potencial que existe en América Latina cuando el talento, el conocimiento y el compromiso social se unen con un propósito. Son iniciativas que parten de la realidad de sus contextos y buscan soluciones reales, accesibles y alineadas con las necesidades de la población.