En un contexto donde la economía global enfrenta retos sin precedentes, México muestra señales de una posible mejora en su política monetaria, gracias a la disminución sostenida de la inflación subyacente. Expertos de instituciones financieras de renombre, como Julius Baer, Goldman Sachs, y Deutsche Bank, concuerdan en que este indicador, al mostrar una tendencia a la baja, abre la puerta a la posibilidad de que el Banco de México (Banxico) inicie un ciclo de recortes en las tasas de interés. La inflación subyacente, al excluir los precios volátiles por factores climáticos o decisiones administrativas, ofrece una visión más clara del impacto real de la política monetaria y la actividad económica sobre la economía.
Según los análisis, se espera que la inflación subyacente durante el primer trimestre del año se sitúe en un 4.6%, ligeramente inferior al 4.7% previsto en diciembre. Este indicador ha completado 12 meses consecutivos a la baja, lo que refleja el impacto acumulado de una política monetaria restrictiva y sugiere una recuperación económica en marcha. Específicamente, los precios de los productos agropecuarios, que forman parte del índice no subyacente y representan el 25% del índice general, han sido destacados por expertos de Goldman Sachs como impulsores de la inflación general, aunque escapan del alcance directo de la restricción monetaria.
Expertos de Deutsche Bank han señalado la importancia de la orientación futura de las políticas monetarias, anticipando que Banxico ajustará la tasa en próximas reuniones, especialmente si se observa una moderación adicional de la inflación subyacente en febrero y la primera quincena de marzo. Por su parte, Julius Baer subraya que las proyecciones de inflación subyacente de Banxico, que prevén una desaceleración hasta el 3.5% para el último cuarto del año, podrían ser el detonante para el primer recorte de tasas, previsto para la reunión del 21 de marzo, momento en el cual la Junta de Gobierno contará con datos completos de inflación de febrero y marzo.
La tendencia decreciente de la inflación subyacente en México es un indicador prometedor para el futuro económico del país. La posible disminución de las tasas de interés, anticipada por analistas financieros, podría marcar el inicio de una era de recuperación y crecimiento económico sostenido. Este potencial recorte en las tasas refleja no solo la eficacia de las políticas monetarias implementadas hasta ahora, sino también la confianza en la capacidad de la economía mexicana para navegar hacia aguas más tranquilas en el contexto económico global actual.