Recientemente, Estados Unidos ha expresado su preocupación por la supuesta falta de transparencia en las importaciones mexicanas de acero y aluminio desde terceros países. La Representación Comercial de Estados Unidos (USTR) ha señalado a México por un posible aumento en la exportación de estos materiales hacia territorio estadounidense, lo que ha reavivado el temor a la reimposición de aranceles. Katherine Tai, la representante comercial de la Casa Blanca, ha mantenido conversaciones con Raquel Buenrostro, titular de la Secretaría de Economía de México, buscando soluciones inmediatas y eficaces para este dilema comercial.
La USTR ha acusado a México de una supuesta triangulación de acero y aluminio, lo que ha generado una fuerte respuesta por parte de la Secretaría de Economía mexicana, asegurando que todos los datos sobre importaciones están disponibles y refutando las acusaciones de falta de transparencia. “La embajadora Tai enfatizó la urgente necesidad de que México tome medidas inmediatas y significativas”, destaca la declaración de la USTR, señalando la posibilidad de volver a imponer aranceles a estos productos, rememorando las medidas adoptadas temporalmente entre 2018 y 2019.
La respuesta de México no se ha hecho esperar, alineándose en algunos puntos con Estados Unidos, como en la reciente homologación de aranceles al acero y aluminio. Sin embargo, México rechaza las acusaciones de opacidad, proponiendo una agenda de cooperación que incluye, entre otros aspectos, la consolidación de la homologación arancelaria y el fortalecimiento de los mecanismos regionales de trazabilidad para combatir la triangulación, un problema que afecta a toda América del Norte.
El contexto de este conflicto se inscribe en una agenda económica donde el acero y el aluminio han sido temas sensibles, especialmente con la creciente producción de China y las acusaciones de prácticas de dumping. La Canacero, por su parte, defiende la legalidad y transparencia de las exportaciones de acero mexicano a Estados Unidos, negando cualquier práctica de triangulación.
Este conflicto comercial entre México y Estados Unidos subraya la complejidad de las relaciones comerciales internacionales y la importancia de la transparencia y cooperación entre naciones. Mientras Estados Unidos busca salvaguardar su industria nacional, México defiende la integridad y legalidad de sus exportaciones.
La resolución de estas tensiones requerirá diálogo continuo, entendimiento mutuo y, sobre todo, acciones concretas que satisfagan a ambas partes, manteniendo el equilibrio en el comercio de acero y aluminio en América del Norte.